…en ordenador.
«En primer lugar, obviamente, necesita usted un ordenador, que es una máquina
inteligente que piensa por usted. Eso sería una gran ventaja para mucha gente.
Todo lo que necesita es un programa de unas pocas líneas; hasta un niño podría
hacerlo. Luego hay que meter en el ordenador el contenido de unas cien novelas,
obras científicas, la Biblia, el Corán, y un puñado de listines telefónicos (muy
útiles para encontrar nombres de personajes). Digamos, unas 120 000 páginas.
Después de eso, usando otro programa, hay que aleatorizarlo todo; en otras
palabras, mezclar todos esos textos, ajustados un poco —por ejemplo, eliminando
todas las es— para conseguir no solo una novela, sino ya una especie de
lipograma de Perec. En ese momento, pulse « imprimir» y, puesto que usted ha
eliminado todas las es, salen algo menos de 120 000 páginas. Tras leerlas
cuidadosamente varias veces, subrayando los pasajes más significativos, llévelas
a una incineradora. Entonces, simplemente siéntese bajo un árbol con una hoja
de papel carbón y otra de buen papel de dibujar y, dejando fluir sus
pensamientos, escriba dos líneas. Por ejemplo: « La luna está alta en el cielo / El
bosque cruje» . A lo mejor lo que sale al principio no es una novela, sino más
bien un haiku japonés. Pero lo importante es empezar.» Umberto Eco